La alta sensibilidad es un don, una herramienta que te permite poder profundizar y empatizar más con las cosas. Pocas personas tienen la capacidad de llegar a este punto de aprendizaje vital…
Pero también, se paga un alto precio por la alta sensibilidad: El conocimiento de las emociones es una arma de callado poder. Nos acerca más a las personas para entenderlas, pero a su vez, también nos hace más vulnerables al dolor que queriendo o no, nos provocan…
A pesar de todo, afortunado aquel que tiene este don, porque cada día será un carrusel de emociones y sentimientos, que le harán sentir que está vivo y sobretodo, que su pasaje por esta vida, a pesar de tanto dolor, habrá valido la pena… porque fue vivida a plenitud!
Athena.